DEVUELVO los libros de Manuel Vilas y me concedo una tregua: Una sola vida (recopilación poética) y Ordesa, memorias sui generis. A ambos les sobran páginas pero supongo que hoy –cuando todo se vende al peso–esto es un plus, así el lector puede escoger y sentirse importante.
Ambos libros me han interesado, en especial el de poesía. Vilas, además de talento literario, tiene una desenvoltura, un desparpajo que me gustan. Pero lo que más me gusta es la ternura, la compasión y el humor marengo casi negro de este hombre.
Intentaré seguir con él más adelante.
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AYER, con el apoyo de comunistas y separatistas, fue investido Sánchez como presidente. Se ha acabado lo malo (todo el asqueroso proceso negociador de este sujeto y su partido el PSOE) y empieza lo peor (pagar todo lo que ha prometido y que amenaza con destruir la nación española).
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