
Acabo de ver en DVD
El americano impasible, de
Philipe Noire (2002), basada en la novela homónima de
Graham Green. Me ha gustado mucho esta mezcla de relato bélico e intriga amorosa que protagoniza un magnífico
Michael Caine -todavía más impasible que el propio americano, un para mí desconocido, pero interesante,
Brendan Fraser. Mención especial para el director de fotografía,
Christopher Doyle, australiano con fuertes querencias extremo orientales, que aporta una visión húmeda y neblinosa del Vietnam de los años 50.
Philippe Noire/ Graham Green rastrean aquí los orígenes de la guerra del Vietnan y cómo la intervención de los americanos en la lucha entre comunistas y colonialistas franceses terminará enfangando a aquellos en una larga guerra. Interesante también la casi ritual manipulación que sufren las actividades de grupos terroristas, un terreno propicio para que nada sea lo que parece o de cómo los servicios secretos de las potencias pueden llegar a manipular los crímenes terroristas, siempre con la sangre de inocentes y como tributo a la perversidad humana.

El triángulo amoroso que se describe aparece también en otra película espléndida,
El fin del romance, de mi admirado
Neil Jordan (1999), basada en otra novela de Graham Green. En esta ocasión es la encantadora
Julianne Moore –qué extraña y admirable su belleza- quien consigue emocionar al espectador más templado, aunque para emoción, la de éste Neil Jordan en la inolvidable
Juego de lágrimas.
Parece que al católico Green le interesaban las relaciones sentimentales a tres bandas, un tema agudizado –sobre todo en su época, hacia los 40 y 50 del pasado siglo- por la dogmática indisolubilidad del matrimonio católico. Es un tema que, en nuestros días, ha perdido fuerza. Al haberse atenuado la prohibición (no por la Iglesia católica, sino por los usos sociales) parace haberse diluído también el deseo, como suele ocurrir en estos casos.

Curioso también el destino de este escritor inglés,
Graham Green, tan leído y popular aquí a mediados del siglo XX, con decenas de ediciones baratas, en traducciones muchas veces disuasorias, y que hoy está relegado al olvido de los novelistas, pese a su nada desdeñable calidad. Las novelas y las películas tienen esa característica en común: la mayoría son efímeras. Tienen su momento de gloria y luego desaparecen entre una avalancha de novedades.
Me gustó mucho "el americano impasible" El libro lo tuve que leer por narices en el Instituto. Me encantó. Años después vi la peli y también me gustó mucho. Michael Caine en su línea y Brendan Fraser en lo que me ha parecido una de sus mejores actuaciones, ya que siempre me ha parecido bastante tarugo.
ResponderEliminarHe leido varios libros de Graham Greene y me han gustado bastante. De tu texto me ha emocionado saber que también aprecias "Juego de lagrimas" una de las mejores pelis que se han rodado en los 90, a mon avis.
Me gustaria recomendarte un libro que puede ser interesante para una persona como tu vives a ambos lados de una raya en el mapa. Se trata de "la linea de la libertad" de Peter Eisner.
Anonimo Garcia.
Gracias AG. Tomo nota de la recomendación.
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