lunes, 23 de febrero de 2009

Cuestión de fe


¿A dónde va uno sin fe en estos tiempos? A ninguna parte.

“Todavía no me lo creo”, ha declarado Pé tras recibir el Oscar. Mujer de poca fe. Como bien dicen los titulares de los periódicos: “Se ha coronado un sueño”. Así que todos se han puesto a llorar, incluído Pedro (Almodovar), y la premiada ha estado a punto de desmayarse. ¿Ya han perdido la fe en Obama? Voilà.

También es para no creerselo el ver al lehendakari y a la presidenta del Parlamento vasco disfrazados de Mr. Spock. Bueno, en realidad Ibarretxe no iba disfrazado. Se supone que no le hace falta. Carnaval y elecciones. Qué bonita mezcla. Tiempo ha que volvió la fe en don Carnal.

La fe está también presente en las tradicionales encuestas electorales del domingo previo a las elecciones. Es curioso lo bien que se adaptan éstas al medio para el que trabajan: las hay de izquierdas, de derechas, nacionalistas, españolistas y no saben no contestan.

Ver para creer.

11 comentarios:

  1. Lo de Spock fue muy heavy. Alguien le debió decir que había que aprovechar eso como fuera, que las encuestas están como están y que todo vale si da votos. Y entonces el tío allá que fue. Lo oí por primera vez en la Ser y allí hubo comentarios para todo, quien decía que esto le hundía, quien decía, poco más o menos, que inauguraba una nueva forma de hacer política. Bueno, ni una cosa ni otra. Pero la verdad, en conjunto, yo creo que el tema es pénico.
    En fin. Seguimos.

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  2. Imagen fresca y juvenil, como si fuera un recién llegado, je, je. Lo mismo cuela. Cosas más raras se han visto.

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  3. Y dice Ibarretxe: ¡es que, ténganlo ustedes presente, el PSE y el PP lo que se plantean es echar al nacionalismo, es su único objetivo!

    Toma! Pues estaría bueno. ¿Cuál iba a ser, si no? ¿Pues qué se piensan los nacionalistas, que los demás partidos están de adorno?

    Evidentemente, esto es lo que piensan los nacionalistas. Que los demás partidos están de adorno, junto a ellos, como en un belén, ellos el niño jesús y los demás alrededor, adorándoles.

    Hay que echarles, votando, naturalmente. Pero hay que echarles. Cada vez está más claro. Por salud pública, por higiene democrática, que se dice. Sus poltronas huelen ya demasiado mal. Y luego hay que abrir las ventanas de los despachos y de los departamentos, airear ese ambiente, que lleva demasiado tiempo cerrado. Si tal cosa ocurre, respiraré hondo y me alegraré de verdad. Será como volver a revivir la muerte de Franco, la Transición entera, las huelgas y las manifestaciones con ikurriñas hasta en la sopa. Será como empezar otra vez de cero. La verdad es que es tan hermoso pensar en un cambio de gobierno en el País Vasco, es tan increible, que de ser verdad, de ocurrir, lo voy a disfrutar de verdad.

    Aunque sea por un rato solo, el justo para volver a decepcionarme con los que vengan. Pero ese momento, por Dios, ese momento que nadie me lo quite. Necesito verlo. Creo que la sociedad vasca entera lo desea también. Y que lo vamos a disfrutar todos si ocurre.

    Abrazos maketos.

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  4. Hombre, Pedro. Eso de que la sociedad vasca entera lo desea (el cambio político) vamos a dejarlo para el 2 de marzo. En cualquier caso yo no creo en los peces de colores.

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  5. La politica en Euskadi no va a cambiar en absoluto gane quien gane ya que está bastante clara la inoperancia de todos ellos. Solo se discute quien se sienta en la poltrona ya que se siente el que se siente en ese sillón, van a hacer todos lo mismo.

    Pensar que las cosas van a cambiar por que el Partido del Negocio Vasco pase a la oposición me parece de una ingenuidad tan infantil que me da hasta envidia.

    Anonimo Garcia.

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  6. Estoy contigo, A.G. El caramelito del cambio está de lo más chupado. A otro perro con ese hueso.

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  7. La fe... ¿Has dicho fe? ... El caso es que me suena de algo... A ciertas edades empiezan a llegarnos los ecos (que irán a más) del pretérito anterior y, sin duda, debe de ser que algún fantasma del pasado ha querido hacerse presente. (¡Vaya! ¡Qué alegoría más lograda: fe y fantasma!)

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  8. Es tiempo de elecciones y la política en Euskadi es distinta a la política en cualquier otro lugar de España (ellos se encargan de que lo sea haciendo presente la violencia, la coacción). Por eso la sociedad civil tiene derecho a la normalidad y hay que ejercerlo. Como los de ese programa de humor de ETB ¿no? Puede uno reirse. A mí me resultó muy verosimil el parecido con Mr Spock. Me hizo gracia y creo que fue simpático. Espero que la lucha partidaria no nos quite la capacidad de reirnos.

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  9. "La sociedad civil tiene derecho a la normalidad y hay que ejercerlo". Estoy de acuerdo, Francisco. Pero la "normalidad" no consiste sólo en ir a las urnas cada cuatro años. Eso no sirve de gran cosa si luego no puedes abrir la boca.

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  10. Hablar en el País Vasco es, en demasiadas ocasiones, matizar o tener que explicarse y es una pena. En tal caso, me explicaré: yo siempre me he sentido libre de abrir la boca en Pamplona, y he dicho lo que pensaba, he encontrado intolerantes como en cualquier otro lugar, violentos como en otras partes, gentes -es una pena- sin ningún sentido del humor, sin cintura, fundamentalistas. Pero también aquí, en el Sur, lo
    s hay: he tenido que dejar de ir a algunas tertulias por ello. Los extremos se tocan: son igualmente fascismos de camisa negra. Yo aspiro, y para ello hay que ejercerlo, a ejercer la normalidad democrática, aspiro (si me obligan, que allí te obligan, a posicionarme) a la retaguardia, no me gusta la trinchera y no es cobardía; aspiro al europeísmo cultural, admiro el seny catalán, compatible con el nacionalismo. El nacionalismo no es "per se" una ideología condenable. Lo que puede condenarse es determinada política de un partido, si practica una política excluyente. Pero lo mismo que hay un catolicismo integrista, y eso no me lleva a condenar la religión católica, el nacionalismo no es Ibarretxe, y sí una persona honrada puede ser nacionalista. Yo me refería al sentido del humor ¿es posible sin que nos culpen de frívolos? Un abrazo.

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  11. Estoy de acuerdo contigo, Francisco. Pero dime, ¿has encontrado terroristas en todas partes?

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