jueves, 28 de agosto de 2008

Diálogo imposible









Estas esculturas no dialogan con el claustro, como al parecer se pretende. No hay posibilidad alguna de que ocurra algo semejante. Hay, entre otros, un problema de texturas. Esto sólo sirve para que nadie se fije en el bello claustro exterior de la catedral de Burgos y para que los turistas ansiosos se hagan fotos.

Bernardí Roig
Marina Núñez
Tinieblas y luz