Esta mañana he escuchado en la radio que el gobierno norteamericano va a destinar 500.000 millones de dólares para apoyar y sacar del agujero al sistema financiero de su país, es decir, a los bancos. No doy crédito. Estoy empezando a no entender nada o, desgraciadamente, a entenderlo todo demasiado bien.
Algo me dice que esto de la economía de libre mercado es algo que sólo funciona en un sentido, en el sentido de los ciudadanos de a pie que tienen que hacer fente a sus obligaciones crediticias a tocateja, so pena de que “todo el peso de la ley” caiga sobre sus cabezas, a saber: la ruina a la primera o segunda morosidad. En el sentido contrario, en el sentido tanto de bancos y entidades financieras como de instituciones públicas, la cosa no pinta tan dura. Siempre aparece papá Estado –debidamente metamorfoseado en cualquiera de sus mil disfraces- para “inyectar fondos” y ayudar a resolver el problema. Por el “bien de todos”, naturalmente, faltaría más.
Han acumulado tanto poder que creen que la gente es tonta. Y puede que no anden muy descaminados.
Por si estais de humor os dejo este par de enlaces de El confidencial:
Grennspan estuvo ahí con demócratas y republicanos
Un titular a toda página