E. Hopper, Oficina de noche
Las dos terceras partes de este libro de relatos escogidos de Tobías Wolf tienen tanta calidad que resultan un poco apabullantes. Cuando el lector llega al tercio final del libro, donde se recogen las últimas historias escritas por este autor, se produce algún alivio. Demasiada perfección fatiga. Y eso que, una vez más, la versión que nos ofrece Mariano Antolín Rato deja bastante que desear. Uno no espera una traducción literal de una obra literaria pero sí, al menos, una versión en un español correcto.
El término realismo sucio, en el que se ha encasillado a este escritor, rechina. Es peyorativo y muy impreciso. Yo, en todo caso, lo llamaría realismo sobrio. No hay una palabra de más en estos relatos. No hay una palabra inútil y que no esté justificada. El trabajo artesanal de Wolf, el acabado de cada una de sus historias, es una delicia.
Partiendo de cualquier mínimo suceso o actividad cotidiana Wolf monta una narración en la que se recogen sensaciones, recuerdos, vivencias o querencias de sus protagonistas. Le interesan sobre todo las relaciones de la gente. Relaciones entre padres e hijos, entre amigos, entre jefes y empleados, entre vecinos… Siempre relaciones pues las relaciones que mantenemos son las que condicionan y determinan nuestras vidas.
Me gustan también los finales ambiguos de estos relatos, finales que dejan un gran campo abierto a la imaginación del lector. Pero, sin duda, lo que prefiero de Wolf es su estilo, su modo de proceder. Cómo describe a un personaje, a un paisaje, a un objeto, con dos o tres rasgos, con una docena de palabras, con dos o tres frases bien medidas.
La vida y la sociedad que describe Wolf dista mucho de ser perfecta pero hay una honestidad en su mirada, una honestidad crítica, pero en ningún caso demoledora, hay un esfuerzo de comprensión de la vida y de las personas que resulta muy digna de aprecio.
El primer relato libro, titulado En el jardín de los mártires norteamericanos puede leerse aquí.
Curiosamente el relato que da nombre a la colección no está incluido. Puede leerse en la web Narrativa Breve, donde pueden encontrarse otros muchos relatos y también poemas
No hay comentarios:
Publicar un comentario