Tres dibujos realizados con un programa de pintura que viene en el móvil.
Los traigo aquí porque dándole a un par de botones aparecen como por encanto.
Me hubiera gustado ser pintor, pero no pudo ser.
La fotografía ha venido a sustituir esa vocación frustrada.
Pero la fotografía es mucho más limitada que la pintura.
De vez en cuando, por rachas, hago algún dibujo, alguna pinturilla.
Luego, me olvido y más tarde aún, repesco alguna cosa.