sábado, 30 de julio de 2016

Salvador Paniker, Diario del anciano averiado



Salvador Paniker, Diario del anciano averiado, Ramdon House, 2015

Ultima entrega de sus diarios. Interesante, como casi todo lo suyo.

Es llamativo su dejarse mecer por la corriente en lo político.

La frialdad y distanciamiento no sé si me producen rechazo o admiración o ambas cosas alternativamente.

A veces se me antoja un poco acaparador. Es el hombre que lo tiene todo: dinero, prestigio, mujeres, excelentes relaciones sociales, éxito literario, buen gusto…

Su deliciosa pluralidad de conocimientos e intereses.

Don de la amenidad en su escritura. Ausencia de superficialidad. No juega tanto con las anécdotas como con las ideas.

Su dependencia de la farmacopea lo humaniza. Lo mismo que sus achaques de salud.

Excelente capacidad de síntesis. Algo tan rato en la intelectualidad española.


Los diálogos que mantiene con sus amadas me parecen un poco inverosímiles pero, procediendo de este hombre, tampoco resultarían extraños.