domingo, 10 de mayo de 2020

Ultimo día de confinamiento


A partir de mañana nos devuelven la libertad de movimientos con restricciones. Casi dos meses en confinamiento domiciliario, tanto en España como en Francia. Con qué facilidad se puede perder la libertad, el don más preciado después de la vida.
Se podrá salir a cualquier hora sin pensar en que la policía vaya a controlarte, sin rellenar el papel preceptivo, sin mirar el reloj para no pasarte de la hora. Pero sigue prohibida la playa, no se puede pasar a España y tampoco puedes alejarte más de cien kilómetros.
Lo peor serán los coches, es decir, el ruido, la contaminación y los atascos. Lo que se llama la normalidad. Porque la normalidad, entre otras cosas, es eso: el ruido, la contaminación y los atascos.
Va a llover todo el día. Y mañana también. La normalidad.