Biografía de Miguel de Cervantes por el escritor Alberto Szpunberg (Buenos Aires 1940-Barcelona 2020), que he encontrado en el armario de los libros regalados. Bastante completa y objetiva resume correctamente la vida y la obra del autor del Quijote.
La vida adulta de Cervantes transcurrió bajo los reinados de Felipe II y Felipe III. Fue contemporáneo de, entre otros grandes, Lope de Vega, Fray Luis de León, Fray Luis de Granada (los dos luises de Azorín) Góngora, El Greco, Santa Teresa de Jesús, San Juan de la Cruz, Montaigne, Ronsard, el autor del Lazarillo de Tormes, Shakespeare.
El erasmismo es la fuente de la gran corriente satírica que surge en España a mediados del siglo XVI y puede explicar el humor y la ironía que animan la literatura de Cervantes, un autor dispuesto a reírse de todo, hasta del propio humanismo que atraviesa su escritura. El sometimiento a la duda y a la crítica siempre han sido las bases de todo humanismo.
El uso contínuo del diálogo en el Quijote también tendría su origen en la influencia del erasmismo. Erasmo recuperó el viejo recurso socrático de la Antigüedad clásica.
En el último epígrafe de este buen libro, bajo el título Algo más que un destino, se resume la vida de nuestro principal escritor. Dice así:
La pobreza, las deudas y las angustias económicas persiguieron a Cervantes desde la niñez hasta su muerte, desde el encarcelamiento de su padre, en Valladolid, hasta sus propias prisiones en Andalucía y su entierro de caridad. Sincero en su más íntima religiosidad, fue excomulgado dos veces por haber decomisado, en cumplimiento estricto de su deber, algunos bienes eclesiásticos. Sus esperanzas –ir a América, servir al Conde de Lemos en Nápoles– siempre se vieron frustradas, y la gloria literaria no le alcanzó hasta ya viejo, en los últimos diez años de su vida.
