

Hendaya
18.12.07
---
Añoraba las nubes después de tantos días de inmaculados cielos azules y atmósfera gélida. Helas aquí, paseándose sobre el horizonte. La playa estaba hoy -en el comienzo de la bajamar- deliciosamente tranquila. El oleaje se ha apaciguado, el clamor marino se ha convertido en un susurro. Las gaviotas, y sus chillidos, se han alejado hacia los acantilados. La arena tersa y la temperatura agradable invitaban al paseo. Bon jour, he saludado a una bella joven con una larga falda negra y un sombrerito de ala redonda del mismo color que jugaba con su lulú blanco. Bon jour, ha contestado ella con una sonrisa encantadora y una ligera y cortés inclinación de cabeza. Tobías, mi perrito, ha corrido a sus anchas. El también estaba de buen humor –siempre lo está- pero esta mañana tenía ganas de jugar.
Por aquí llevamos muchos días de cielos así. El azul de los cielos del Maresme es delicado y está lleno de transparencias. Sin viento, sin nubes y con un mar calladito y recogido, el paisaje parece prepararse para recibir al invierno. Hace frío. Mucho frío. ¡Qué diferencia con el invierno pasado! Ni un sólo día eché mano de mis jerseis de cuello alto y la misma suerte corrió el abrigo. Este año, en cambio, la cosa se ha puesto seria.
ResponderEliminar¡bon jour!
ResponderEliminarHola Mertxe. No olvides acceder a través de Blogger para que tu nuevo blog sea accesible a todos.
ResponderEliminar¡Bon jour, Olvido!
ResponderEliminar:-)