Blog del escritor Juan Luis Seisdedos. --Aquí hay de todo. Si estás interesado deberías dirigirte al Índice. --Por arte de birlibirloque algunas fotos han desaparecido. Habría que preguntarle a Google. Yo lo he intentado, pero no contesta.
Tus fotos de la playa de Hendaya me recuerdan los bodegones de Giorgio Morandi: en una atmósfera grisácea se repiten una y otra vez los mismos elementos. Ambos parecéis presos de una fascinación inagotable, de la que disfrutamos los espectadores.
Es cierto lo que dice Glo. Me refiero a lo de la atmósfera grisácea, de la cual participo plenamente y no porque las circunstancias me empujen a ello. Siempre he tenido una clara inclinación por lo borroso del paisaje, sentía mejor su misterio, penetraba en mí su esencia, era como vivir a la orilla de los sueños. Qué rarita es una, ¿no?, aunque quizás no, quizás estas sensaciones forman parte de ese inexplorado territorio mental que todos tenemos y que, a veces, se manifiesta y entonces las palabras no pueden con las sensaciones.
Mertxe, llevamos tantas semanas envueltos en grisuras que casi no se puede sacar la cámara y hacer otra cosa que grises. Pero no. En realidad cuando luce el sol dejo la cámara en casa. Me gusta así.
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ResponderEliminarTus fotos de la playa de Hendaya me recuerdan los bodegones de Giorgio Morandi: en una atmósfera grisácea se repiten una y otra vez los mismos elementos. Ambos parecéis presos de una fascinación inagotable, de la que disfrutamos los espectadores.
ResponderEliminarGracias, Glo. Muy halagador. ¿Fue Oteiza el que dijo que el arte no es poner sino quitar?
ResponderEliminarEs cierto lo que dice Glo. Me refiero a lo de la atmósfera grisácea, de la cual participo plenamente y no porque las circunstancias me empujen a ello. Siempre he tenido una clara inclinación por lo borroso del paisaje, sentía mejor su misterio, penetraba en mí su esencia, era como vivir a la orilla de los sueños. Qué rarita es una, ¿no?, aunque quizás no, quizás estas sensaciones forman parte de ese inexplorado territorio mental que todos tenemos y que, a veces, se manifiesta y entonces las palabras no pueden con las sensaciones.
ResponderEliminarMon Dieu, quel jour!
Mertxe, llevamos tantas semanas envueltos en grisuras que casi no se puede sacar la cámara y hacer otra cosa que grises. Pero no. En realidad cuando luce el sol dejo la cámara en casa. Me gusta así.
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