sábado, 31 de enero de 2009

Tinglado

Hay un consenso en desdeñar a la política y a los políticos. Tiene que ver con el hartazgo y la desilusión. Sin embargo, henos aquí (yo el primero) hojeando un periódico tras otro, mareando el dial radiofónico y echando de menos a los medios cuando, por la razones que sean, paso dos o tres días desconectado. Los añoro en proporción directa al alivio que siento al alejarme de ellos. Muchas veces me pregunto si cualquier avance espiritual no requiere, como medida previa e ineludible, la ruptura total con todo ese tinglado, dicen que informativo.