domingo, 4 de septiembre de 2016

Cuzcurrita del Río Tirón y sus dos ermitas

El castillo y el puente de Cuzcurrita vistos desde la orilla del Tirón

Cuzcurrita del Río Tirón tiene un castillo muy bien conservado, y una bonita iglesia, y casas nobles en su parte antigua y un río con su puente de piedra y chalés en los alrededores. Pero lo más hermoso de Cuzcurrita permanece un poco oculto: es el paseo ajardinado junto al Tirón, bien sombreado este agosto, con el agua que baja impetuosa, con un salto de agua que procede del castillo y que abastece al lavadero, con una preciosa vista de la iglesia y, en general, con un aire romántico agradable y encantador.


Esta es otra de las villas altorriojanas que en la Edad Media fue una plaza fuerte amurallada. Su curioso nombre, según parece, es de origen prerromano. Se trata de un diminutivo de cozcorra, que tiene dos significados: tronco de árbol o guijo del río.


La parroquia de San Miguel, barroca, tiene una bella y curiosa fachada

Como otras localidades de la comarca, durante el verano está llena de veraneantes, en buena parte procedentes del País Vasco. Todo tiene un poco el aire de Verano azul, con niños esparcidos por las calles, adolescentes en bicicletas por las inmediaciones y padres (y abuelos) alternando en bares y terrazas.

Uno de los buenos planes para realizar en la localidad y en la comarca es visitar alguna de las muchas bodegas abiertas al público. Una vez conocido el delicado proceso de fabricación del vino, es una buena oportunidad para degustarlo y, de paso, ir afinando el paladar.

Otro buen plan es dar paseos. Las localidades no distan demasiado unas de otras y un sinfín de caminos, flanqueados por viñedos y campos de cereal, comunican unas con otras.

 Campos de cereal recién cosechados

En Cuzcurrita hay dos bellas ermitas. Acercarse hasta ellas caminando es una actividad muy recomendable.

 Ermita de Nuestra Señora de Sorejana 


La primera a la que nos hemos acercado es la Nuestra Señora del Tironcillo, situada a tres kilómetros aguas abajo. Es la más reciente (mediados del XVIII) y de estilo barroco. Durante el paseo hemos disfrutado de la compañía de un vecino jubilado que recorre a diario los caminos y que nos ha ido ilustrando sobre las peculiaridades del cultivo de la vid.

Nuestra Señora del Tironcillo

La otra ermita, la de Nuestra Señora de Sorejana, está en la dirección opuesta, aguas arriba, apenas a un par de kilómetros. La tarde que la visitamos amenazaba lluvia. Nos dijeron que hacía mes y medio que no llovía. Bajo un cielo con mucho relieve nuboso apenas cayeron cuatro gotas. La ermita, al pie del camino que conduce a … está situada en un paraje rodeada de campos. Es románica y sus dimensiones son considerables para una ermita.

Cuando regresamos llueve un poco más, lo justo para refrescar el ambiente. En Cuzcurrita ha empezado y terminado nuestro viaje de unos días a La Rioja. Antes de emprender la vuelta intentamos comprar el vino que probamos en la cena de la víspera y que nos gustó mucho, pero la bodega aún está cerrada. Habrá que volver cuando se acaben las botellas que adquirimos en Anguciano.