sábado, 18 de abril de 2020

Una tormenta


Nada como una tormenta para que te olvides del spleen. He salido con la camisa en la mano, el ánimo bajo, el paso corto. He fotografiado florecillas de las cunetas. Junto a una casa ha aparecido una jauría de perros enervados tras una cerca. Pobres vecinos. Al llegar a la playa se me ha venido encima un ventarrón gélido, la tibieza del aire se ha transformado en frío. El cielo amenazante y oscuro impresionaba. Enseguida he dado la vuelta, seguramente me iba a empapar. La fronda del camping se agitaba alocada. Ha pasado un tren cargado de cloruro de vinilo. Han caído algunas gotas. Al llegar a casa ha empezado la tronada.








No hay comentarios:

Publicar un comentario