Como todo el mundo sabe, la sanidad pública en España es una pura maravilla. La gente está más que satisfecha al respecto. Pero, no en toda España. Hay un lugar recóndito, gobernado por una mujer facha, donde las cosas no son tan perfectas. Ese lugar es, curiosamente, la capital del país. La buena gente madrileña se ha echado a la calle para protestar por la pésima calidad de su sanidad pública. El resto de los españoles se dicen admirados: cómo es posible que teniendo en España la mejor sanidad del mundo la situación en Madrid sea tan desastrosa. Y se muestran muy agradecidos de que en sus respectivas comunidades no ocurra lo que ocurre en ese Madrid gobernado por esa mujer tan facha.